Ballade COSC: Diseñado por el Tiempo, Certificado por la Precisión
Fundada en 1853, Tissot ha marcado el paso del tiempo con creaciones que han definido a generaciones. Desde los mares abiertos con el Seastar, hasta el encanto retro del PRX y el espíritu competitivo del PR516, la marca ha presentado diseños que se han convertido en símbolos de su época, creaciones que siguen escribiendo nuevos capítulos a medida que avanza el tiempo.
En sus archivos se esconden tesoros, cada uno con una historia que espera ser contada. El Ballade es uno de ellos. Lanzado por primera vez en 1994, fue una declaración de modernidad en un mundo aún sujeto a las convenciones.
Tres décadas después, ese espíritu sigue vivo, ya que Tissot mantiene vivo su legado, inspirándose en el pasado para dar forma al presente con una visión renovada. Relanzado en 2024 con motivo de su 30º aniversario, el Ballade entra en una nueva etapa en 2025 con una versión automática, equipada con la precisión certificada del Contrôle Officiel Suisse des Chronomètres (COSC).
Un Rostro Familiar, Perfeccionado con el Tiempo
Hay cosas que solo mejoran con el tiempo, y el Ballade es un ejemplo perfecto. Verdadero testimonio del savoir-faire de Tissot, su diseño ha evolucionado a lo largo de los años, llevando consigo las marcas de la experiencia. En 2025, las últimas incorporaciones a la colección vienen en 39 mm y 30 mm, cada una expresando el mismo espíritu atemporal en una proporción diferente. La edición de 39 mm, con opciones de esfera en plata, azul intenso o verde con efecto rayos de sol, encarna el equilibrio entre la tradición y la modernidad, con cada tono seleccionado para reflejar la evolución del estilo a lo largo del tiempo. Una cuarta variante combina una caja de PVD bicolor en oro amarillo con una esfera plateada con efecto rayos de sol, aportando a la colección los códigos visuales de la relojería de lujo. El modelo de 30 mm ofrece un marco más pequeño, pero cada detalle transmite la misma fuerza. Existe en una variante plateada o azul claro con efecto rayos de sol, o en una versión bicolor de PVD en oro rosa, cada una de las cuales escribe un nuevo capítulo en el continuo viaje de Ballade.
En todos los modelos, el bisel estriado enmarca la esfera como un homenaje a la tradición, mientras que el cristal de zafiro con doble capa antirreflejos garantiza una legibilidad óptima. Mejorada con Super-LumiNova® en las agujas y los índices, la esfera se mantiene clara en todas las condiciones. El acabado guilloché con efecto rayos de sol añade profundidad y textura, complementado con números romanos para dar un toque atemporal. Completa la composición un brazalete intercambiable de cinco eslabones, una característica distintiva de la colección Ballade, que añade sofisticación al diseño.
Las referencias de 39 mm, que impulsan la colección, albergan el Powermatic 80 con una reserva de marcha de 80 horas, mientras que las referencias de 30 mm cuentan con el Powermatic 48, con una reserva de 48 horas, lo que permite que el tiempo fluya sin interrupciones mucho después de que el reloj se haya quitado de la muñeca.
El Savoir-Faire se une a la Cronometría
Certificado por el Contrôle Officiel Suisse des Chronomètres, el Ballade COSC cumple con los más altos estándares de cronometría suiza, y su fiabilidad ha sido probada mediante rigurosas pruebas en condiciones reales. Durante 15 días consecutivos, el movimiento se evalúa según siete estrictos criterios definidos por la norma ISO 3159. Esta distinción lo sitúa entre los relojes mecánicos más precisos del mundo, una marca de excelencia que pocos relojes logran alcanzar.
Esta certificación va acompañada de una atención especial al detalle: el fondo de la caja calado revela la masa oscilante grabada con las palabras «Certified Chronometer», una característica en la que convergen el arte y la maestría técnica. Con este lanzamiento, Tissot continúa la estirpe del Ballade, labrándose un lugar entre una nueva generación, manteniendo la mirada puesta en el futuro, donde la tradición se une a la innovación.